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¿Qué es la gastronomía sostenible y cuál es su impacto? | CIB

Escrito por Victòria Poyatos Garcia | julio 2025

La cocina ya no es solo un espacio de creación o tradición. Hoy, es también un lugar de decisión. Cada ingrediente elegido, cada técnica aplicada y cada menú diseñado tienen un impacto —en la salud de las personas, en el equilibrio del entorno y en la evolución de la cultura alimentaria. La gastronomía sostenible representa la respuesta más lúcida y comprometida ante esta nueva realidad.

A medida que los desafíos globales en salud, medio ambiente y seguridad alimentaria se agudizan, crece también la necesidad de profesionales capaces de liderar ese cambio desde las cocinas. No se trata solo de cocinar con conciencia, sino de entender que, en el siglo XXI, la sostenibilidad ya no es una opción: es el camino para quienes quieren trascender con su oficio.

Índice

  1. ¿Qué es la gastronomía sostenible?
  2. ¿Por qué es importante la gastronomía sostenible y cuál es su impacto?
    1. Formación como base para liderar este cambio
  3. Salidas profesionales para el especialista en cocina saludable
  4. Uso de técnicas culinarias de bajo impacto
  5. ¿Cómo se puede implementar en un restaurante?
    1. Emprender desde la sostenibilidad: una oportunidad estratégica
  6. Tendencias actuales en gastronomía sostenible

¿Qué es la gastronomía sostenible?

 

La gastronomía sostenible consiste en aplicar principios de sostenibilidad a toda la cadena alimentaria: desde la producción y transporte hasta la cocina y el consumo final. Busca reducir el impacto ambiental, proteger la biodiversidad, promover la salud y fomentar economías locales más justas. Sitúa en el centro de la práctica culinaria el respeto por el entorno, la salud de las personas y el bienestar colectivo.

Según la FAO, una dieta sostenible debe ser saludable, asequible, segura, culturalmente aceptable y tener bajo impacto ambiental, tanto para las generaciones actuales como para las futuras. Y el chef que entienda estas variables se convierte en un actor clave del cambio.

Este enfoque se articula sobre cuatro pilares fundamentales:

  • El uso de ingredientes locales y de temporada.
  • La promoción de modelos alimentarios biodiversos y respetuosos.
  • La conciencia nutricional aplicada a la creación de menús equilibrados.
  • El aprovechamiento y la reducción sistemática del desperdicio alimentario.

Lejos de ser una corriente limitada a restaurantes especializados, la sostenibilidad se ha convertido en una competencia transversal que atraviesa toda la cadena de valor de la gastronomía.

¿Por qué es importante la gastronomía sostenible y cuál es su impacto?

En un mundo donde la producción y el consumo de alimentos representan cerca del 30% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, la cocina se convierte en una herramienta clave de impacto. Más allá del sabor, cada plato puede ser una declaración de intenciones, una contribución directa a la salud de las personas y al bienestar del planeta.

Este enfoque permite a los profesionales ir más allá de lo técnico y lo creativo. Implica adoptar una actitud responsable: pensar en el origen de los productos, en su impacto ambiental, en su valor nutricional y en el tipo de sociedad que se contribuye a construir desde la cocina. Para quienes vienen del mundo de la salud o la nutrición, significa convertir el conocimiento teórico en experiencias gastronómicas con sentido. Para chefs consolidados, es una vía de renovación, diferenciación e innovación.

Al adoptar una visión sostenible, es posible optimizar recursos, reducir desperdicios, incorporar nuevos ingredientes y conectar con productores locales. Todo ello fortalece el modelo de negocio, genera fidelidad y responde a una demanda creciente de comensales que valoran la trazabilidad, la ética y el equilibrio nutricional.

De hecho, la Agenda 2030 de las Naciones Unidas reconoce la gastronomía como un motor clave para alcanzar varios de sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), como el hambre cero, la salud global, el consumo responsable o la acción climática. Tanto es así que, desde 2016, se celebra el Día Mundial de la Gastronomía Sostenible cada 18 de junio.

En este nuevo paradigma, el chef del presente —y sobre todo del futuro— ya no será solo quien sepa cocinar bien, sino quien sepa pensar, liderar y transformar desde la cocina.

Formación como base para liderar este cambio

Gestionar la sostenibilidad en cocina no puede quedar en intuiciones o buenas intenciones. Requiere conocimientos rigurosos, pensamiento crítico y una visión holística que combine ciencia, técnica, salud, creatividad y comunicación. Por eso, formarse en gastronomía saludable de forma adecuada es fundamental para actuar con criterio y generar impacto real.

En el programa PEC·H Integrative & Healthy Cooking del Culinary Institute of Barcelona, se fusiona la ciencia nutricional con la práctica culinaria para convertir la cocina saludable en una experiencia de bienestar físico, mental y social. Aquí, la sostenibilidad no es un módulo aislado, sino un eje transversal que atraviesa todas las áreas de formación.

El programa prepara a sus estudiantes para:

  • Diseñar menús respetuosos con el entorno, basados en ingredientes locales, de temporada y nutritivos.
  • Aplicar técnicas culinarias de bajo impacto.
  • Gestionar eficientemente los recursos.
  • Comunicar con autenticidad su compromiso ético y ambiental.
  • Impulsar conceptos innovadores alineados con un modelo alimentario más justo y regenerativo.

Salidas profesionales para el especialista en cocina saludable

El ecosistema de la gastronomía sostenible y saludable es diverso y va más allá de la cocina tradicional. En el programa PEC·H Integrative & Healthy Cooking, se forman especialistas en cocina saludable y conviven al menos dos perfiles principales: por un lado, profesionales provenientes del ámbito sanitario o nutricional (como dietistas, nutricionistas o técnicos en alimentación) que no necesariamente cocinan, pero que aportan conocimiento científico y supervisión; y por otro lado, quienes sí cuentan con experiencia culinaria profesional y se encargan de llevar estas directrices al plato.

Algunas de las salidas profesionales para el especialista en cocina saludable serían:

  • Especialistas en nutrición y salud: se centran en el diagnóstico nutricional, la personalización de pautas alimentarias y el diseño de planes que promueven el bienestar físico, emocional y metabólico del usuario.
  • Chef privado: trabaja de manera cercana al cliente final, diseñando y cocinando menús diarios según las pautas establecidas por un nutricionista o coach en salud.
  • Chef con trayectoria culinaria tradicional: aplican las bases saludables y sostenibles directamente en la cocina
  • Equipos colaborativos: equipos mixtos, donde un perfil sanitario diseña la pauta y un perfil culinario la ejecuta.
  • Chefs en la industria alimentaria e I+D: se convierte en una figura estratégica para la elaboración de formulaciones, procesos y pruebas sensoriales.
  • Chefs deportivos y de rendimiento: adaptan el plato a los macronutrientes necesarios en función del deporte, momento del ciclo de entrenamiento y características individuales.

Uso de técnicas culinarias de bajo impacto

Una cocina verdaderamente sostenible no solo depende de los ingredientes que se utilizan, sino también de cómo se cocinan. Las técnicas culinarias de bajo impacto forman parte de los principios fundamentales de la gastronomía sostenible, al igual que el uso de ingredientes locales y de temporada, la promoción de la biodiversidad alimentaria, el consumo responsable y la reducción del desperdicio de alimentos.

Entre otras, estas técnicas buscan reducir el consumo energético, minimizar la emisión de gases contaminantes, optimizar el uso del agua y, en muchos casos, preservar mejor el valor nutricional de los alimentos. Algunos ejemplos incluyen la cocción al vapor o baja temperatura, fermentación natural, deshidratación, entre otros.

Aplicar estas técnicas no implica renunciar a la creatividad ni al sabor, sino adaptar los métodos de cocción y conservación para hacerlos más eficientes, saludables y responsables. De hecho, muchas de ellas han sido tradicionalmente sostenibles —como el vapor, el escabeche o la fermentación— y hoy se reinterpretan en clave contemporánea.

Estas decisiones no son solo éticas o medioambientales, sino también estratégicas: permiten ahorrar costes operativos, mejorar la reputación del negocio y conectar con un público cada vez más consciente del impacto de su alimentación.

En el marco del programa PEC·H Integrative & Healthy Cooking del CIB, este enfoque se aborda desde una doble perspectiva: como herramienta técnica para mejorar la propuesta culinaria, y como parte fundamental del liderazgo profesional de una cocina alineada con los desafíos de salud y sostenibilidad globales.

¿Cómo se puede implementar en un restaurante?

Adoptar la sostenibilidad no implica rehacerlo todo, sino tomar decisiones más conscientes y estructuradas en cada etapa del proceso gastronómico. Desde planificar menús basados en la temporalidad y la biodiversidad, establecer relaciones sólidas con proveedores de proximidad, hasta diseñar platos pensados para evitar el desperdicio o formar al equipo en prácticas responsables, cada gesto suma.

La clave no está en aplicar una receta única, sino en encontrar un punto de partida coherente con la identidad del proyecto. Puede ser en la selección del producto, en el uso de técnicas de bajo impacto, en la reducción del plástico, o incluso en la narrativa del menú. Lo importante es tener el conocimiento para evaluar el impacto y tomar decisiones con criterio.

Para lograr esa transformación real, es fundamental contar con herramientas adecuadas. Formarse en gastronomía sostenible permite comprender el alcance de cada decisión culinaria, integrar criterios de salud, trazabilidad y circularidad desde la raíz, y liderar equipos alineados con una visión ética y regenerativa del oficio.

Emprender desde la sostenibilidad: una oportunidad estratégica

Cada vez más profesionales apuestan por emprender en el ámbito de la alimentación con propósito. Ya sea abriendo un restaurante saludable, un servicio de cocina personalizada, una línea de productos funcionales o un proyecto educativo, la sostenibilidad bien entendida no es un freno, sino una ventaja competitiva.

Formarse en gastronomía sostenible no solo proporciona conocimientos técnicos y criterios éticos, sino también una visión clara para desarrollar modelos de negocio viables, coherentes y diferenciadores.

En este sentido, combinar programas como PEC·H Integrative & Healthy Cooking con formaciones de perfil empresarial —como el DCS · Emprendimiento de Restaurantes o el ECD · Executive Chef Diploma del CIB— permite a los profesionales desarrollar conceptos gastronómicos innovadores que integren salud, sostenibilidad y rentabilidad.

Este enfoque dual capacita a los futuros emprendedores para:

  • Identificar oportunidades de negocio alineadas con los nuevos hábitos de consumo.
  • Comunicar un relato de marca sólido y con propósito.
  • Optimizar procesos desde una mirada sostenible sin comprometer la experiencia del cliente.
  • Liderar equipos con cultura ecológica y responsabilidad social.

Porque emprender en gastronomía hoy ya no es solo abrir un restaurante: es construir propuestas con alma, con impacto y con futuro.

Tendencias actuales en gastronomía sostenible

La sostenibilidad no es un concepto estático: evoluciona y se reinventa constantemente. En los últimos años, ha pasado de ser un valor añadido a convertirse en uno de los principales motores de innovación en el sector gastronómico. Hoy en día, hablar de cocina contemporánea implica, inevitablemente, hablar de impacto, coherencia y propósito.

Entre las tendencias más relevantes en la gastronomía sostenible que están marcando el presente, —y el futuro— destacan:

  1. La consolidación de las dietas plant-based: La cocina basada en plantas ha dejado de ser una opción alternativa para convertirse en una propuesta central en muchos restaurantes, que apuestan por elaboraciones innovadoras, técnicas sofisticadas y narrativas culinarias más comprometidas.
  2. El uso de ingredientes funcionales y regenerativos: Fermentados, algas, hongos, superfoods, ingredientes adaptógenos o alimentos de cultivo regenerativo están ocupando un lugar creciente en las cocinas que quieren ir más allá del sabor.
  3. La gastronomía como vehículo de salud personalizada: La cocina saludable evoluciona hacia una dimensión más integradora, terapéutica y adaptada a las necesidades individuales.
  4. La valorización de las culturas alimentarias locales: revisitar tradiciones culinarias que históricamente han priorizado el aprovechamiento, la estacionalidad y la economía circular.
  5. Nuevas formas de medir y comunicar el impacto: la trazabilidad y la transparencia se han convertido en parte esencial de la experiencia gastronómica.
  6. Rediseño de espacios y operaciones gastronómicas: No solo importa lo que se cocina, sino también cómo y dónde se cocina.
  7. El chef como educador y activista: asumen un rol divulgador que va más allá del plato.

Estas corrientes no solo reflejan un cambio de valores, sino también una transformación estructural en el sector. Herramientas como la creación de menús con etiquetas de huella de carbono son efectivas: por ejemplo, estudios demuestran que marcar la opción más sostenible como predeterminada reduce significativamente las emisiones por plato.

La sostenibilidad ha dejado de ser un “extra” para convertirse en el nuevo estándar profesional. Y solo aquellos que se formen con una base sólida, que sepan aplicar estos criterios con creatividad y criterio, estarán preparados para liderar los cambios que la industria necesita.